Introducción

Esta guía considera lo que es pertinente sobre la participación de equipos de géneros mixtos y las circunstancias en que a las niñas se les debe permitir jugar Rugby de contacto con niños. La guía considera las diferencias en el desarrollo físico y mental de niños y niñas en las diferentes etapas de progresión a través de los programas por edades establecidos en las Uniones.

World Rugby reconoce las diferencias peculiares entre las Uniones en todo el mundo y procura proporcionar directivas para el manejo de esta cuestión de parte de las Uniones Miembro. Las Uniones Miembro son responsables del desarrollo de la política específica de su Unión.

Ámbito de aplicación

Esta guía se aplica a todos los niveles del juego y se debe utilizar cuando corresponda en conjunto con la Guía de Diferenciales de edades de World Rugby.

Lineamientos

Las mejores prácticas son que la participación en equipos de géneros mixtos sólo se permita hasta el final de la temporada (incluida la siguiente temporada baja) en la cual el jugador cumple los 12 años.

En circunstancias excepcionales, un jugador de más de 12 años de edad puede jugar en un equipo de géneros mixtos cuando no exista otra opción para seguir jugando al Rugby aparte de esta. 

Para garantizar que eso sea pertinente para los jugadores en tales circunstancias, se deben cumplir los siguientes criterios: 

1. Acuerdo por escrito de los padres o tutores del jugador para jugar y aceptación del riesgo asociado de jugar con personas que pueden ser más fuertes y estar más desarrolladas físicamente que ellos;
2. Confirmación por escrito de un médico con conocimientos de las demandas del Rugby que conozca al jugador de que el jugador se encuentra en condiciones físicas para jugar al Rugby en el nivel deseado y de que esta opinión es respaldada por una evaluación musculoesquelética y/u otras evaluaciones apropiadas;
3. Acuerdo por escrito de un oficial médico con conocimientos de las demandas del Rugby empleado o perteneciente a la Unión de origen del jugador de que el jugador está en condiciones físicas para jugar al Rugby en el nivel deseado y de que esta opinión es respaldada por una evaluación musculoesquelética y/u otras evaluaciones apropiadas;
4. Confirmación por escrito de un entrenador con conocimientos adecuados de los atributos físicos requeridos y de los riesgos para los jugadores en el Rugby y que conozca al jugador, que el jugador tiene las destrezas y experiencia necesarias para jugar al Rugby en el nivel deseado; y
5. Otros consentimientos, acuerdos o confirmaciones (si corresponde) que puedan ser requeridos por la Unión de origen del jugador o para cumplir con las disposiciones locales.
6. Debido a la naturaleza particular de las posiciones de la primera línea en comparación con otras posiciones, se deben efectuar las consideraciones apropiadas en los protocolos de evaluación descriptos anteriormente con respecto a si se debe permitir o no al jugador jugar en la primera línea.

Un jugador no debe participar en equipos de géneros mixtos una vez que haya alcanzado la edad de 15 años.

Independientemente de su edad y género los jugadores deben estar preparados para jugar de forma segura y deben haber cumplido un programa de concientización de seguridad como Rugby Ready o el equivalente disponible en su Unión de origen.

Consideraciones de desarrollo y participación del jugador

Si bien el bienestar del jugador es la consideración clave cuando se implementan políticas para las Uniones en relación con el Rugby de contacto de géneros mixtos, también es importante enfocar esta cuestión desde una perspectiva de desarrollo y participación. Las Uniones deben tener en cuenta las siguientes consideraciones de desarrollo al diseñar programas por edades para niñas:

• Las investigaciones indican que las niñas prefieren practicar deportes con niñas principalmente por razones relacionadas con la interacción social. Es más probable que las niñas permanezcan involucradas en el deporte si en su programa de desarrollo se les da esta oportunidad.
• No se debe desalentar a las niñas menores de 12 años de que no jueguen con niños, pero se les debe proporcionar una opción exclusiva para niñas para atraer al número óptimo de niñas al Juego.
• Cualquier política de Géneros Mixtos en el Rugby implementada por las Uniones debe ser desarrollada como parte de un programa más amplio para niñas y mujeres en el rugby. Los Modelos de Desarrollo del Jugador a Largo Plazo y las investigaciones ayudarán en este proceso.
• Cualquier circunstancia en la que se permita a las niñas jugar junto con niños debido a la falta de acceso a equipos exclusivos de niñas debería ser una solución a corto plazo y las Uniones deberían elaborar planes para garantizar que las niñas tengan acceso a equipos de un solo género en sus Uniones.