Socios Globales
Turf Banner 1

Lineamientos

Directriz de higiene y control de infecciones

Esta guía contiene los pasos aconsejables a dar para prevenir infecciones

Las enfermedades infecciosas se transmiten directa o indirectamente a partir de una persona infectada. Los deportistas interactúan estrechamente con compañeros de equipo, oponentes y personal del equipo. Además, frecuentemente comparten equipamiento de entrenamiento y en los gimnasios, instalaciones, salas y lugares de entrenamiento, alojamientos, viviendas temporales, toallas, botellas de agua y suministros y generalmente realizan viajes nacionales e internacionales.

Además, los viajes internacionales exponen a los deportistas a enfermedades autóctonas para las cuales pueden tener poca o ninguna inmunidad natural. Finalmente, hay cierta información que sugiere que los deportistas tienden a asumir riesgos que pueden aumentar su posibilidad de contraer infecciones.

Las categorías de factores de riesgo potenciales para propagar una infección son:

  • Compartir equipamiento, instalaciones de entrenamiento
  • Lesión en la piel
  • Contacto estrecho: en el campo de juego, alojamiento
  • Fuera del campo de juego: viajes, actividades personales
  • Poblaciones diversas

Las infecciones pueden transmitirse por contacto de persona a persona, por exposición a una fuente común o por transmisión vía un vector portador.

El foco principal de atención debe ser la prevención primaria mediante la implementación de medidas de higiene, el uso de inmunizaciones (vacunas) y el uso de intervenciones para prevenir la propagación secundaria de la infección. Las medidas de prevención secundaria incluyen la prevención de la recurrencia y la prevención de la propagación progresiva de la infección desde un paciente de origen.

La educación de los jugadores en aspectos clave de las infecciones es un elemento fundamental de la prevención.

1. Medidas de higiene

Precauciones básicas

Las precauciones básicas combinan las principales características de las Precauciones Universales y Aislamiento de Sustancias Corporales. Se basan en el principio de que la sangre, los fluidos corporales, las secreciones excepto el sudor, la piel no intacta y las membranas mucosas pueden contener agentes infecciosos transmisibles. Las precauciones básicas incluyen un grupo de prácticas de prevención de infecciones que se aplican a todas las personas independientemente de la sospecha o la confirmación de una infección. Las características clave de las precauciones básicas incluyen:

  • El uso de guantes cuando se toque material bio peligroso como piel abierta, fluidos corporales de membranas mucosas.
  • Lavarse las manos con jabón y agua caliente después del contacto con lo mencionado aún cuando se hayan usado guantes.
  • Limpiar las superficies completamente con lejía o lavandina diluida (solución al 10%)
  • Colocar los objetos cortantes en un recipiente a prueba de pinchazos con riesgo biológico
  • Cubrir toda herida antes de entrar al campo de juego

Desinfección del equipamiento

El equipamiento debe manejarse de manera de prevenir la transmisión de agentes infecciosos, incluida la limpieza y esterilización adecuadas de los equipos reutilizables.

Pueden existir bacterias y virus en el equipamiento. El estafilococo áureo resistente a la meticilina (SARM) se ha encontrado en vendas de gel e hidromasajes en instalaciones de entrenamiento. Otras bacterias especialmente Pseudomonas spp. también se han relacionado con brotes de infección por el uso de hidromasajes.

Los lineamientos para la adecuada desinfección y mantenimiento de hidromasajes, saunas, máquinas de hielo y piscinas son provistas por la estadounidense Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA). Usar una solución diluida de lejía o lavandina al 10% (una parte de lejía o lavandina en 9 partes de agua) para limpiar las áreas de entrenamiento y el equipamiento.

El equipamiento que ha estado en contacto con sangre y fluidos corporales debe lavarse con lejía o lavandina diluida como se indicó anteriormente. Cualquier toalla u otro material que esté contaminado con sangre debe lavarse adecuadamente

Higiene personal

Una buena higiene personal ayuda a reducir la colonización de bacterias. Lavarse las manos regularmente es fundamental para prevenir la propagación de infecciones. Es necesario el lavado de manos con jabón durante 15-30 segundos, luego 30 segundos de enjuague con agua y un secado completo con una toalla. El uso de enjuagues y gels con concentraciones de 50-95% de alcohol lleva 15 segundos y es efectivo para matar organismos. El jabón de clorhexidina se ha mostrado útil para reducir la transmisión de infecciones por SARM. Eduque a los jugadores y al personal en el lavado de manos.

Para la prevención de transmisión de otras infecciones transmitidas por gotículas/aerosoles, o vía oral, vea la sección de Infecciones individuales.

2. Infecciones específicas

(a) Lesiones en la piel y tejidos blandos

Todo deportista con una lesión en la piel (abrasión, raspadura, etc.) debe ser retirado del campo de juego hasta que la zona de la lesión haya sido cubierta de manera segura con vendas o vendajes oclusivos para evitar la fuga de fluidos corporales y proteger la lesión de una infección. Se debe prestar especial atención al cuidado de la herida después del partido para evitar la infección de la piel.

(i) Infecciones bacterianas y su prevención

Las causas comunes de infecciones bacterianas de la piel son las bacterias Gram positivas: Estafilococos áureos y Estreptococos spp. Estas infecciones pueden complicar las abrasiones o la rotura o raspadura de la piel. Las infecciones comunes son infecciones de heridas, forúnculos, abscesos e infecciones superficiales como el impétigo.

El uso recreativo o profesional de drogas inyectables aumenta el riesgo de ser portador Estafilocócico y quiebra las barreras cutáneas normales aumentando el riesgo de infección. Este grupo de infecciones generalmente responde al cuidado local de la herida y a la terapia tópica o con antibióticos orales. Algunos brotes pueden originarse en portadores asintomáticos identificados mediante cultivos nasales

El impétigo es una infección cutánea superficial contagiosa generalmente causada por Estreptococos del grupo A o Estafilococos áureos. Se presenta con llagas o ampollas y se propaga por contacto directo piel con piel. A menudo se confunde con infecciones asociadas al HSV-1, pero su persistencia por más de una semana y su apariencia de costra de panal lo distingue de esta infección viral. En el tratamiento se usa ungüento tópico de mupirocina y una buena higiene de manos.

La infección originada en Estafilococos áureos resistente a la meticilina (SARM), tanto asociada a la asistencia hospitalaria (SARM-HA) como adquirida en la comunidad (SARM-CA), ha sido informada en deportes de contacto como el fútbol americano y la lucha, pero también en deportes de contacto mínimo como la esgrima. Considere la infección con SARM si hubiera una respuesta deficiente a los antibióticos standard y el diagnóstico puede ser confirmado mediante hisopado de la lesión.

Las infecciones con SARM que son adquiridas por personas que no han sido hospitalizadas recientemente (dentro del último año) o que se han sometido a un tratamiento médico (como diálisis, cirugía) se conocen como SARM adquirido en la comunidad (CA). El SARM-CA por lo general se presenta como una infección de la piel y tejidos blandos, como forúnculos y abscesos. Los factores asociados con la propagación del SARM incluyen abrasiones o raspaduras de la piel producidas por la ropa y en ambientes calientes, el intercambio de equipamiento y el contacto piel con piel relacionado con el deporte. Dependiendo de la fuente del SARM y la condición de la herida las infecciones del SARM de la piel pueden tratarse con incisión y drenaje solamente y si es necesario se recetan antibióticos según lo determinado por los patrones de susceptibilidad.

Los médicos del equipo deben alentar firmemente y educar a los miembros del equipo sobre la buena higiene general y de las manos, la importancia de cubrir las heridas y los beneficios en términos de transmisión de infecciones de la limitación de compartir el equipamiento. Se debe disponer gratuitamente de un amplio suministro de gels a base de jabón y alcohol o enjuagues de manos. Los deportistas deberían ser educados para reconocer las heridas potencialmente infectadas y buscar atención médica de las mismas.

(ii) Infecciones virales

 Scrum-pox (Infección del scrum o Herpes Rugbeiorum)

Esta infección es causada por una infección por HSV-1. En particular, los forwards en el rugby es probable que desarrollen lesiones faciales a partir del contacto cara a cara en el scrum. Esto se conoce comúnmente como scrum-pox o prop-pox (infección del pilar). Por lo general, ocurre en la región de la cabeza y el cuello. Una condición similar ocurre a los luchadores denominada herpes gladiatorum (herpes del gladiador).

La transmisión se produce desde una persona infectada a otra persona susceptible por contacto de piel a piel. La mayoría de los lineamientos se aplican al deporte de lucha y la recomendación es que el luchador no tenga síntomas sistémicos de infección viral, no tenga nuevas lesiones durante 72 horas y no tenga lesiones húmedas. Todas las lesiones deben secarse y cubrirse con una capa firme y adherente. El jugador debe recibir terapia antiviral oral durante por lo menos 120 horas. Las opciones de tratamiento son acyclovir 400mg dos veces al día (5 días), Valaciclovir 2g dos veces al día (1 día) o Famciclovir 1500mg una dosis solamente. La prevención de la transmisión se facilita mediante el examen de lesiones activas en los deportistas y el retiro de la competición de las personas afectadas.

Los jugadores que tienen un historial recurrente de herpes labial o de infección del scrum deben ser tratados como se indica arriba para disminuir el riesgo de transmisión. Los jugadores con brotes frecuentes deben ser considerados para su atención durante toda la temporada o la atención por la duración de un torneo, con la medicación antiviral adecuada. Las opciones de tratamiento son regímenes diarios de 400mg de aciclovir dos veces al día, Valaciclovir 500mg una vez al día o Famciclovir 250mg dos veces al día por una duración determinada en la temporada o el torneo. La atención durante la temporada es eficaz para reducir significativamente la frecuencia y gravedad de los brotes.

(iii) Erupciones fúngicas y su prevención

El pie de atleta (tinea pedis) es una afección común. La prevención incluye lavarse los pies diariamente, secarse entre los dedos de los pies, usar medias de algodón, usar zapatos de baño en duchas públicas y sandalias cuando hace calor.

La infección superficial inguinal (tinea cruris) causa un sarpullido rojo y picazón en la ingle y la mejor prevención consiste en ducharse inmediatamente después de actividades atléticas y usar calzoncillos de algodón. Se puede usar un buen talco en polvo como medida preventiva adicional para estas dos condiciones. La tiña (tinea corporis) se previene evitando el contacto. Los antifúngicos tópicos también pueden ser útiles.

(b) Infecciones de transmisión sexual (ETS) y Prevención

Los deportistas pueden sufrir un riesgo mayor de exposición a las ETS debido a su edad, viajes y vida social lejos de su vida habitual. El contacto regular con el personal médico del equipo brinda la oportunidad de abordar la cuestión de la salud sexual y el médico del equipo con frecuencia es el único contacto que algunos deportistas tienen con los servicios de salud.

Las áreas clave de la prevención son:

  • Educación sobre prácticas sexuales más seguras
  • Identificación de individuos asintomáticos
  • Diagnóstico y tratamiento de personas infectadas
  • Identificación y tratamiento de parejas sexuales
  • Disponibilidad y uso de vacunaciones previas a la exposición cuando corresponda

Las medidas preventivas para las ETS incluyen una educación apropiada sobre el mantenimiento de la salud sexual, abstinencia del contacto sexual si una persona está activamente infectada o en tratamiento, vacunación previa a la exposición contra la Hepatitis B y A y el virus del Papiloma Humano (VPH) y el uso de condones. La mayoría de los condones están hechos de látex y son efectivos para la prevención de las ETS. Los condones masculinos reducen significativamente la transmisión de la gonorrea, la clamidia y la tricomoniasis. El riesgo de transmisión del VIH se reduce por lo menos en un 80%. Con el uso del condón existe cierta protección contra el VHS-2 y una reducción del 70% contra el VPH. En el caso de que una persona sea alérgica al látex es probable que ciertos condones de poliuretano sean igualmente efectivos, aunque su tasa de rotura es más alta. El uso de espermicidas y métodos anticonceptivos sin barrera no cumplen ninguna función en la prevención de las ETS. El aviso a la pareja es un aspecto importante del control de las ETS y se debe alentar a los deportistas que estén infectados a que informen a sus parejas para facilitar el tratamiento epidemiológico y el examen oportuno de la salud sexual.

La mejor forma de prevenir la transmisión de las ETS es abstenerse de contacto sexual sin protección y tener una relación a largo plazo mutuamente monógama con una pareja que se sabe que previamente ha dado negativo para todas las ETS diagnosticables.

La detección de las ETS puede ser solicitada por un deportista. Las infecciones que rutinariamente se examinan son Chlamydia trachomatis, n. gonorrea, a través de hisopos o pruebas de orina (ver abajo) y sífilis, Hepatitis B y VIH mediante análisis de sangre. En general, la presencia clínica se utiliza para el diagnóstico de infecciones por VPH y VHS. Todas las ETS son tratables y la mayoría curables

(i) Uretritis/cervicitis/proctitis

Clamidia trachomatis

La clamidia es una ETS común causada por la bacteria, Clamidia trachomatis. La clamidia se transmite durante el contacto sexual vaginal, anal u oral. Mientras mayor sea el número de parejas sexuales, mayor será el riesgo de infección. La clamidia se conoce como una enfermedad "silenciosa" porque hasta el 75% de las mujeres y el 50% de los hombres no tienen síntomas. Si los síntomas aparecen, generalmente lo hacen dentro de 1-3 semanas.

Los hombres con síntomas generalmente se presentan con secreción de su pene o sensación de ardor al orinar. El dolor y la hinchazón de los testículos pueden resultar como consecuencia de la epididimitis y la epididimoorquitis.

Las mujeres con síntomas generalmente se quejan de flujo vaginal anormal o sensación de ardor al orinar. Si la infección se propaga a las trompas de Falopio, la mujer puede quejarse de dolor abdominal bajo, fiebre y dolor durante el acto sexual.

Las complicaciones en los hombres son epididimitis y síndrome de Reiter (artritis, lesiones cutáneas y conjuntivitis). La aparición en un jugador de una hinchazón en una articulación grande no traumática debe incluir una evaluación para la infección por Chlamydia.

Las complicaciones en las mujeres son enfermedad inflamatoria pélvica, embarazo ectópico e infertilidad.

El diagnóstico se establece por el historial de relaciones sexuales sin protección con la confirmación de infección en el laboratorio realizando una prueba de orina u obteniendo una muestra de un sitio, es decir, la punta del pene o el cuello uterino.

La prueba es muy específica y sensible.

El tratamiento para Clamidia es directo y es curable con antibióticos.

Azitromicina 1 gramo (dosis única)

O

Doxiclina 100mg dos veces al día (tratamiento de una semana)

Las personas con clamidia deben abstenerse de tener relaciones sexuales hasta que ellas y sus parejas habituales reciban tratamiento, generalmente un período de 7 a 10 días después del tratamiento.

Todas las parejas sexuales deben ser evaluadas, testeadas y tratadas.

Retorno al juego: Ver después de Gonorrea 

Gonorrea

La gonorrea es una infección de transmisión sexual causada por una bacteria, Neisseria gonorrhoeae. La gonorrea se transmite a través del contacto con el pene, la vagina, el ano o la boca.

Algunos hombres no tienen síntomas de infección. Sin embargo, si aparecen síntomas, generalmente lo hacen entre 2 y 5 días después de la exposición a la infección, mucho menos que para la clamidia. Los pacientes masculinos se quejan de ardor al orinar o de una secreción amarilla o verde del pene. A veces los hombres sufren dolor o hinchazón de testículos.

Las mujeres generalmente no tienen síntomas o son leves. Las mujeres pueden quejarse de ardor al orinar, aumento del flujo vaginal o sangrado vaginal entre períodos. La infección rectal puede ocurrir en ambos sexos con síntomas de secreción, picazón anal y dolor.

Las infecciones de garganta pueden causar dolor de garganta pero generalmente no causan síntomas.

La gonorrea no tratada puede causar epididimitis, una afección dolorosa de los conductos adheridos a los testículos que puede provocar infertilidad si no es tratada. En las mujeres, las complicaciones incluyen enfermedad inflamatoria pélvica y embarazo ectópico.

La gonorrea se puede desparramar a la sangre y articulaciones en 1-3% de las personas infectadas. Las articulaciones más comúnmente involucradas son muñecas, tobillos, manos y pies.

El diagnóstico se basa en el historial de exposición junto con pruebas de laboratorio. Se toma un hisopado del área infectada (cuello uterino, uretra, recto y garganta). La infección por clamidia con frecuencia se produce con la gonorrea y se recomienda el tratamiento empírico para Clamidia en las personas diagnosticadas con gonorrea.

El tratamiento es efectivo para erradicar la infección, sin embargo, las cepas resistentes a los antibióticos son un problema en aumento en muchas regiones del mundo. Es importante conocer los datos de observación de susceptibilidad a los antibióticos de la gonorrea, locales, nacionales e internacionales, para garantizar que se pueda proporcionar un tratamiento adecuado, especialmente si la terapia se administra antes de que se disponga de datos formales de susceptibilidad confirmados por el cultivo. Las actualizaciones sobre la gonorrea resistente a los medicamentos están disponibles en:

http://www.cdc.gov

Tratamiento recomendado: Cefixima 400mg una dosis además del tratamiento para Clamidia como se indica arriba si esta infección no se pudiera descartar

Si el individuo tiene epididimitis el tratamiento de elección es una sola inyección intramuscular de 125mg de ceftrixona y un ciclo de 10 días de doxiciclina oral de 100mg BD

Las personas con gonorrea deben abstenerse de tener relaciones sexuales hasta que ellas y sus parejas habituales reciban tratamiento, normalmente un período de 7 a 10 días después del tratamiento.

Todas las parejas sexuales deben ser evaluadas, testeadas y tratadas

Las formas de prevenir la transmisión de ETS, incluida la gonorrea, es abstenerse del contacto sexual, tener una relación mutuamente monógama a largo plazo con una pareja que se sabe que previamente ha dado negativo para todas las ETS diagnosticables.

Consideraciones de retorno al juego con clamidia y gonorrea:

La uretritis/cervicitis/proctitis simple y sin complicaciones requiere un tiempo mínimo de alejamiento de la práctica y la competición. Los deportistas con epididimoorquitis, enfermedad gonocócica diseminada o EPI deben abstenerse de practicar deportes hasta que haya una mejoría sistémica que incluya la desaparición de fiebre y dolor. Si una articulación infectada complica la infección, se requiere más tiempo para la recuperación y la rehabilitación con fisioterapia. La realización de una artroscopia para el diagnóstico o limpieza puede demorar aún más el regreso a la actividad

Herpes genital

El herpes genital es una infección de transmisión sexual causada por el virus del herpes simple tipo 1 (HSV-1) o tipo 2 (HSV-2). La mayoría de la herpesis genital es causada por el HSV-2 (70% de los casos). Una persona solo puede contraer el HSV-2 durante el contacto sexual con alguien que tiene una infección genital por HSV-2. La transmisión se puede dar a partir de una pareja infectada que no tenga llagas visibles y puede no saber que está infectada. El HSV-1 generalmente causa "herpes labial" o "ampollas de fiebre", pero puede causar infección genital después del contacto oral-genital (30% de los casos). Los brotes genitales de HSV-1 recurren con menos frecuencia que los brotes genitales de HSV-2. La presentación clínica es variable. Si hay síntomas, la infección principal (primer brote) causa úlceras genitales dolorosas, dolor al orinar e inflamación de los ganglios linfáticos. Los brotes recurrentes tienden a tener síntomas más leves con menos úlceras y la diseminación viral solo dura 3 días. Las lesiones generalmente recurren en los mismos lugares.

El diagnóstico se realiza enviando un hisopo para cultivo viral o PCR. Los análisis de sangre para la serología son menos útiles.

El tratamiento es con cursos cortos de agentes antivirales sistémicos. El uso de terapia episódica o supresiva estará guiada por la historia de recurrencia del individuo.

Consideraciones para el retorno al juego:

Después de la infección primaria con HSV, el retorno a la actividad puede hacerse cuando los síntomas sistémicos se hayan resuelto.
Esto puede llevar entre 2 y 6 semanas.
Los brotes recurrentes de herpes genital generalmente se resuelven en unos pocos días. Las lesiones deben sanar antes de retornar al juego.

Para infección del scrum (scrum pox) ver sección de infecciones en la piel.

(ii) Infección por el virus del papiloma humano (VPH) 

El VPH que causa infección genital es muy común con hasta el 80% de las mujeres portando el virus a la edad de 50 años. La mayoría de las infecciones con VPH son asintomáticas. La infectividad no se correlaciona con la presencia o ausencia de lesiones visibles. La transmisión solo ocurre por contacto directo de piel a piel. La incubación varía de semanas a años dependiendo del estado de inmunidad del individuo. Las manifestaciones más comunes del VPH genital son las verrugas genitales externas (EGW) (condiloma acuminata), generalmente causadas por los tipos 6 y 11. Las EGW pueden ser únicas o múltiples en el pene, el escroto, la vulva, el cuello uterino o el área perianal.

Las EGW no tratadas se resuelven espontáneamente, permanecen sin cambios o aumentan de tamaño y número. Las opciones de tratamiento dependen del número, tamaño y preferencia del paciente. Por lo general, se requiere un curso de tratamiento y las opciones incluyen crioterapia con nitrógeno líquido o terapias aplicadas por el paciente con crema/solución de podofilina o crema de imiquimod.

Prevención

El uso de condones reduce pero no elimina el riesgo de infección. La vacunación con la vacuna tetravalente contra el VPH incluye protección contra los tipos 6 y 11

Retorno al juego

No hay reglas específicas para el retorno al juego respecto del VPH

Con el molusco contagioso, una infección viral cutánea, se recomienda cubrir las lesiones solitarias y agrupadas con Op-Site dada la naturaleza contagiosa de estas lesiones.

(c) Infecciones transmitidas por la sangre

Las infecciones transmitidas por la sangre se transmiten por la exposición a la sangre de encías sangrantes, abuso de sustancias, contacto sexual sin protección y viajes a zonas endémicas. El riesgo de transmisión de virus transmitidos por la sangre en lesiones hemorrágicas varía con cada virus. Se estima que la transmisión del VIH es de 1:43 millones de partidos en base a la prevalencia estimada de infección por VIH entre los deportistas, el riesgo de transmisión percutánea del VIH en la atención médica y el riesgo de una lesión sangrienta en el fútbol americano. Los médicos de medicina individual y deportiva deben conocer los principios de la profilaxis posterior a la exposición (PEP) para la infección por el VIH.

El riesgo de transmisión de la hepatitis B es 50 a 100 veces mayor, la VHB es una infección prevenible por vacunación. El riesgo teórico de transmisión de la VHB en el deporte es entre una transmisión cada 850.000 a 4,25 millones de partidos y una transmisión en 10.000-50.000 partidos. En base al riesgo, ahora se recomienda que haya contenedores individuales de agua disponibles para cada jugador en los deportes de contacto. Los deportistas deben usar botellas de agua que se aprietan y no se llevan a la boca.

La educación debe incluir el manejo apropiado de las heridas sangrientas, las pruebas de BBV (voluntarias en lugar de obligatorias) y la vacunación contra la hepatitis B como las principales intervenciones para evitar la transmisión y adquisición de infecciones por BBV.

(d) Meningitis

En casos de meningitis meningocócica se debe considerar la quimioprofilaxis en contactos domésticos y con cualquier persona directamente expuesta a las secreciones orales del paciente y se debe administrar dentro de los primeros días de enfermedad del paciente. Hay poco beneficio en la administración de antibióticos quimioprofilácticos más allá de los 14 días desde el inicio de la enfermedad en el primer paciente. Las medidas de prevención incluyen el uso de la vacunación contra el meningococo según los lineamientos internacionales de inmunización.

Pueden producirse brotes de meningitis aséptica comúnmente causada por una infección enteroviral (ecovirus y virus coxsackie) y deben diferenciarse de las causas de la meningitis bacteriana, algunas de las cuales pueden prevenirse mediante inmunización.

(e) Infecciones virales comunes

Virus de Epstein-Barr  VEB

Aproximadamente 30-50% de los estudiantes de EEUU que comienzan la universidad no son inmunes a la infección por el VEB, el 1-3% de la población general contrae la infección cada año. La resolución de la infección clínica ocurre dentro de las 4-8 semanas. Las complicaciones incluyen fatiga prolongada (algunos datos sugieren que puede llevar hasta 3 meses para que los pacientes retornen a los niveles previos a la enfermedad), síndrome de Guillain Barre, meningitis, neuritis, DIC y anemia aplástica. La ruptura esplénica es muy rara y se estima que complica ~0.1-0.2% de los casos, pero sigue siendo motivo de preocupación para determinar cuándo un deportista debe retornar a la actividad. Se aconseja a los deportistas no retornar al campo de juego hasta un mes después de la infección.

Influenza

La influenza es una familia de virus respiratorios.

La gripe estacional generalmente comienza en otoño y la mayoría de las personas tienen cierta inmunidad contra el virus. La vacunación contra la gripe estacional se basa en las cepas circulantes en los años anteriores y debe considerarse como una vacuna de rutina.

Las cepas que causan la gripe pandémica ocurren esporádicamente. La inmunidad en la población tiende a ser pobre ya que la cepa es nueva. En el caso de una pandemia, los jugadores deben vacunarse una vez que la vacuna haya sido puesta a disposición por las autoridades de control de drogas del país. Los efectos secundarios de la vacunación son poco comunes.

Paperas

Las paperas son una enfermedad viral causada por paramixovirus. Los síntomas clásicos se desarrollan alrededor de 16-18 días después de la exposición. La parotiditis ocurre en aproximadamente la mitad de los infectados pero son comunes síntomas no específicos de fiebre, mialgia, anorexia, dolor de cabeza y malestar. Las complicaciones graves de las paperas son raras. La orquitis ocurre en el 30-40% de los hombres post puberales, pero esto raramente produce esterilidad.

Los pacientes con paperas se consideran infecciosos desde 3 días antes hasta 5 días después del desarrollo de los síntomas. Cualquier jugador con paperas necesita estar aislado. Otros jugadores en contacto con un caso de paperas deben vacunarse con MMR a menos que tengan un registro claro de 2 dosis de MMR.

El diagnóstico de laboratorio se confirma mediante el aislamiento del virus a partir de una muestra clínica, IgM de parotiditis positiva o la demostración de una respuesta específica de anticuerpos contra la parotiditis en ausencia de una vacunación reciente, como un aumento de cuatro veces en el título de IgG.

La prevención es por vacunación. Cualquier jugador menor de 25 años con una sola vacunación debe tener una segunda vacuna. Si los jugadores no están seguros o no tienen acceso a los antecedentes, el jugador debe recibir al menos una dosis de MMR. No hay un tratamiento efectivo para MMR.

Virus Varicela Zoster (Varicela)

El virus varicela zoster (VZV) causa varicela y herpes zóster (culebrilla). Alrededor de 9 de cada 10 personas han tenido varicela antes de los 15 años. El período de incubación es de 10-21 días después de la exposición y las personas son contagiosas durante 2 días antes de que aparezcan las lesiones hasta que quedan cicatrizadas. Las personas con varicela deben estar aisladas y medicamentos antivirales como el aciclovir pueden limitar la gravedad de la infección.

Si una persona está expuesta a la varicela y no tiene conocimiento de su estado de inmunidad, realice una VGS IgG sérica urgente. Si es negativa y, por lo tanto, no inmune, debe administrarse el tratamiento con VZimmunogloulin preferiblemente dentro de las 96 horas posteriores a la exposición: estamos sugiriendo que todas las personas no inmunes, independientemente de su historial médico, deberían recibir VZIg. Hay una  vacuna disponible en muchos países como vacuna infantil o para aquellos que no son inmunes.

3. Inmunización

La inmunización es un aspecto importante de la prevención de infecciones en todas las personas. Las siguientes son cuestiones importantes a considerar al evaluar la prevención de enfermedades en deportistas:

  • mantenimiento de rutina de salud
  • ponerse al día con la inmunización por inmunización primaria omitida o fallida
  • inmunización relacionada con viajes (variación geográfica de requisitos)
  • exposición reciente a agentes infecciosos
  • inmunización de grupos de alto riesgo (p. ej., esplenectomía, inmunocomprometidos, etc.)

La inmunización activa implica la administración de todo o parte de un microbio o una versión modificada tal como un antígeno para estimular una respuesta inmunológica. Aunque la mayoría de las vacunas son 90% efectivas, no se garantiza que promuevan la protección inmunológica. Las vacunas inactivadas son virus muertos o proteínas bacterianas que estimulan el sistema inmunológico para desarrollar anticuerpos contra un agente infeccioso. Las vacunas vivas atenuadas son formas menos virulentas del microbio que infecta y, aunque son muy eficaces, se asocian con más efectos secundarios como dolor en el lugar que se aplicó la inyección.

Las pautas para la inmunización se describen en las tablas que siguen. Los requisitos para la inmunización infantil de rutina varían entre países por lo que es importante garantizar ponerse al día a cualquier persona que haya migrado de un entorno de atención médica que no haya proporcionado vacunas específicas para infecciones que pueden ser más problemáticas para los deportistas: p. ej., gripe anual, MMR, etc. La documentación de las vacunas de rutina para niños y adultos también puede variar, pero es importante asegurarse que se haga todo lo posible para confirmar evidencias de recepción del cronograma de inmunización primario. Se debe considerar la posibilidad de confirmar la inmunidad frente a enfermedades prevenibles por vacunación en deportistas de alto nivel, p. ej., varicela, hepatitis B y los exámenes físicos de pre participación para el ingreso al deporte a nivel profesional deben incluir la documentación del historial de vacunación.

Hay numerosos sitios web que se pueden consultar como herramientas de recursos útiles sobre cuestiones relacionadas con la inmunización:

www.immunisation.ie/childhoodimmunisation

www.immunise.health.gov.au

Los requisitos de vacunación relacionados con los viajes serán determinados por el destino del viaje. Los jugadores y el personal también deben ser advertidos oportunamente sobre cuestiones normales relacionadas con los viajes, como la exposición al sol, la conducción, la prevención del jet lag y la salud sexual. Los sitios de viaje de buena reputación que proporcionarán información actualizada sobre brotes de infecciones deben usarse para guiar las recomendaciones de inmunización:

www.cdc.gov/travel

www.who.int/ith/en

Cuestiones generales relacionadas con el Proceso de vacunación

Se debe tener en cuenta que existen cuestiones logísticas significativas para garantizar la aplicación segura y apropiada de vacunas. Estas incluyen una infraestructura médica adecuada y segura, con acceso a equipos de reanimación, la necesidad de garantizar la documentación adecuada de la administración de las vacunas tanto para la persona como también en caso de retiro de un lote de vacunas y la necesidad de asegurar que el seguimiento serológico post vacunación se realice donde corresponda.

La inmunización pasiva es la administración de anticuerpos preformados (como la inmunoglobulina varicela zoster) para proporcionar inmunidad temporal. La inmunoglobulina humana es la fracción de plasma sanguíneo que contiene anticuerpos. Los preparados de inmunoglobulina pertenecen a 2 categorías:

  1. Inmunoglobulina humana normal
  2. Inmunoglobulina humana específica/globulina híperinmune (HBIG, VZIG). Estos se usan después de la exposición al virus de la hepatitis B y al virus Varicela zoster respectivamente

Vacunas de rutina recibidas durante la infancia: consultar los lineamientos de cada país 

Las vacunas de rutina para adolescentes/adultos varían entre países en función del acceso a la atención médica. Algunos países recomiendan la gripe, el VPH, la vacuna conjugada meningocócica y el refuerzo de la vacuna MMR. La gripe pandémica como el reciente brote de H1N1 puede dar como resultado una recomendación adicional.

 Control de brotes e inmunización

En el tratamiento de un brote de ciertas infecciones prevenibles por vacunación entre los jugadores del equipo, existen lineamientos internacionales que guían el uso de las inmunizaciones para reducir la infección posterior. Las infecciones comunes se describen a continuación. Es posible que se requiera asesoramiento de un especialista en Enfermedades Infecciosas y/o de Salud Pública.

  Tiempo de exposición Administración Seguimiento
Varicela Dentro de las 72 horas de la aparición de la erupción en el caso índice Vacunar si no es inmune  
Influenza   Vacunar a todos  
Hepatitis B   Vacunar si no inmune a HBIG si se sabe que el índice está infectado por VHB Monitorear respuesta serológica a la vacunación
Paperas/Rubéola Las personas susceptibles expuestas no están necesariamente protegidas por la administración post exposición de la vacuna del virus vivo. Sin embargo, una práctica común para personas expuestas a las paperas o la rubéola es administrar la vacuna a personas presuntamente susceptibles de modo que la vacuna proporcione inmunidad permanente si las paperas o la rubéola no resultan de la exposición actual. La administración de vacunas de virus vivos se recomienda para adultos expuestos nacidos en los Estados Unidos en 1957 o después que no hayan sido inmunizados previamente contra paperas o rubéola o las hayan tenido. Vacunar  
Sarampión Dentro de las 72 horas de exposición (puede ser difícil determinar cómo se puede propagar el sarampión desde 4 días antes a 4 días después del inicio de la erupción) la Ig dentro de los 6 días posteriores a la exposición se puede considerar para contactos inmuno suprimidos Vacunar  
Enfermedad meningocócica   Quimioprofilaxis antibiótica. Considerar la vacunación en el contexto del brote  

 

4. Conclusión

Los médicos y encargados del equipo deben alentar firmemente y educar a los miembros del equipo acerca de las buenas medidas de higiene general y específicamente la higiene de manos, la importancia de cubrir las heridas y los beneficios en términos de transmisión de infecciones de las limitaciones a compartir el equipamiento.

Un amplio suministro de jabón y gels a base de alcohol o enjuagues de manos debe estar disponible gratuitamente. Los deportistas deben ser educados para reconocer las heridas potencialmente infectadas y para procurar atención médica.

El conocimiento de las infecciones comunes es fundamental para el reconocimiento, administración y desarrollo de estrategias de prevención. Como se describió, la prevención primaria de la infección se puede promover a través de inmunizaciones precisas, adecuada planificación del mantenimiento de la salud, buenas prácticas de higiene y modificación de comportamientos para minimizar las activaciones de alto riesgo. La prevención secundaria se logra a través de un control vigilante de enfermedades informadas, educación adecuada y contención para reducir la infección si ha ocurrido una enfermedad y profilaxis oportuna con medicamentos e inmunizaciones cuando se indique.