El rugby de Siria hizo historia el fin de semana pasado cuando Sarah Abdul Baki se convirtió en la primer mujer en dirigir un partido doméstico de quince en su país.

Baki se acercó al rugby hace tres años y, según admite, se enamoró del deporte.

En 2018 fue parte del equipo femenino de seven de Siria que hizo su debut internacional en Líbano y fue también allí donde dio sus primeros pasos hacia convertirse en referí.

Baki participó de los cursos de World Rugby tanto en coaching como preparación física en Beirut, aunque fue el curso de referato el que más le llamó la atención.

“El curso hizo que quisiera saber más, tener más detalles del rugby y sobre las reglas y reglamentos," dijo a World Rugby. 

“Me encantó el curso y quise referar un partido y la unión de rugby de Siria me dio esa oportunidad."

Ganándose el respeto

La oportunidad de conducir un partido doméstico de quince llegó la oportunidad de dirigir un partido de quince; debió superar los nervios previos antes de ingresar al campo de juego con un silbato en la mano.

“Fue difícil al comienzo," admitió Baki. 

“Era un enorme desafío para mí. Era mi primer partido, algo difícil pero lo puedo llevar adelante.”

Baki dejó de lado su preocupación cuando al finalizar el partido, los jugadores de ambos equipos mostraron su agradecimiento.

“Vinieron todos a agradecerme y me felicitaron por mi primer partido. Fueron respetuosos y me felicitaron por mi primer partido. Fue fabuloso," agregó Baki.

“Necesité de tener coraje para hacerlo, y fue un importante paso para mí, poniéndome en un lugar en el puedo tener influencia y lograr que mas mujeres se acerquen el rugby."

'No solo para varones'

Si bien Baki tuvo éxito desde que comenzó a jugar con un balón oval hace casi tres años, su recorrido ha tenido sus desafíos.

La jugadora de 22 años, que se sintió atraída por los valores, la pasión y la disciplina del rugby, primero tuvo que superar los estereotipos de género y la percepción de que el rugby no era para las mujeres.

“Es cada día más popular porque más mujeres se acercan al rugby," dijo Baki, feliz de hablar de los avances.

“Al principio fue duro, porque hubo que experimentar muchas dificultades, tratando de convencer a la gente para que me acepte como jugadora de rugby."

“Se considera, especialmente en mi país, que no es para mujeres. Fue un enorme desafío personal pero, eventualmente, logré convencer a las personas que las mujeres pueden jugar rugby. Que no es solo para varones."

Baki describe como un 'sueño' haber jugado para Siria frente a dos equipos representativos de Líbano y Qatar. "Ganarle a Líbano 'Verde' fue fantástico," dice anunciando que no tiene planes aún de cambiar su carrera de jugadora por la de referí o entrenar.

“No creo que deje de jugar," dijo.

“No tengo las cosas claras por el momento, seguiré haciendo de todo y luego veré cual es la correcta para mí."

Inspirando a que las mujeres jueguen rugby

Lo que no está en duda es la pasión que siente Baki por el rugby y su deseo de promover el rugby como un escape para las mujeres viviendo en Siria, un país que sufre los impactos de una guerra continua.

Para ayudar sus ambiciones, Baki espera ser aceptada al programa de becas de liderazgo ejecutivo de World Rugby.

“Quiero influenciar y liderar más mujeres hacia el rugby; para llevar adelante mis planes futuros quisiera ser incluida en el programa de liderazgo femenino para poder seguir ayudando a desarrollar el rugby en mi país, y tal vez el resto de Asia."

“Sí. Es importante para seguir inspirando a que mas gente, más mujeres, jueguen rugby."

“Creo que el rugby puede ayudar a que la gente se comunique mejor y le de mas confianza, sobre todo a las mujeres."

“Como país hemos enfrentado dificultades. El mayor porcentaje de la población somos mujeres, lo que permitirá oportunidades para que el juego crezca y se desarrolle."