KAMAISHI, 13 de octubre – Tratar de conseguir una carrera profesional no es una decisión fácil para muchos jugadores canadienses, que a menudo están divididos entre la pasión por su deporte y la necesidad de ganarse la vida.

El entrenador de los Canucks, Kingseley Jones espera que tomar esa decisión sea cada vez más fácil gracias al programa Americas Combine, que da a los jugadores un ejemplo de cómo es la vida de un atleta profesional.  

“Es duro para los jóvenes”, afirma Jones. “Algunos son ingenieros, son inteligentes. Pueden ganar 80.000 dólares con 23 años o más. ¿Por qué no ganarías nada siendo un jugador de rugby o 10.000? Es una decisión difícil así que este camino quizás les ayude a decidirse”.

El Americas Combine forma parte de las iniciativas de World Rugby para el alto rendimiento y ofrece a jugadores de Norte y Sudamérica una semana de entrenamiento completos en las que sus destrezas y capacidad física son testadas así como la disputa de un partido. El programa también organiza cursos para entrenadores y referís.

Los entrenadores de las selecciones eligen qué jugadores enviar al Combine tanto por las plazas vacantes en la concentración como en las posiciones que quieren desarrollar en sus equipos. En el caso de Canadá son jugadores que alternan sus entrenamientos con sus estudios.

Una buena actuación en el Americas Combine se ha saldado con un pasaporte para jugar en la Major League Rugby.

“Es una gran oportunidad para que muestren sus destrezas”, sostiene Jones. “Vuelven a Canadá entusiasmados con lo que han aprendido en tan corto espacio de tiempo, buscando una oportunidad como profesionales que entrenan todos los días. Una vez que lo prueban, les hace querer ser profesionales”, agrega el entrenador.

Los jugadores que Jones envía a las pruebas son en los que confía para construir la selección canadiense. Pese a que no atiende al Combine personalmente, recibe informes de cómo progresan los jugadores.

Dos jugadores que pasaron por el programa fueron los backs Will Kelly y Josh Thiels, ambos polifuncionales, ya que pueden jugar de apertura, centro o fullback, posiciones de las que Canadá adolece.

“Ellos dos son ejemplos de chicos que realmente quieren se profesionales. Son habilidosos, tienen la mentalidad y es una oportunidad para ellos el poder medirse con chicos de su edad. Les da la confianza para saber dónde están y dónde pueden estar en el futuro”.

“Ojalá que ellos quieran estar en la MLR. Que quieran ser jugadores profesiones”.

A pesar de que al Combine le falta desarrollarse, Jones afirma que, en sus inicios ya ha sido de ayuda para el equipo canadiense. “Sin esto no sé dónde estaríamos. En este momento es un salvavidas. Está en pañales, pero si no continúa es irreal pensar que podremos permanecer entre los primeros 20 equipos del mundo; jugar contra equipos profesionales siendo amateurs es irreal”.

RNS ls/co/jca/np