SHIZUOKA, 29 de septiembre – El famoso partido de Japón con Sudáfrica en Brighton, en 2015 marcó un antes y un después para el rugby nipón; el segundo encuentro del elenco local en la RWC 2019 también estuvo cargado de emociones fuertes. Ambos encuentros tuvieron a un importante actor principal, Michael Leitch, quien dice que no puede separar el triunfo sobre Sudáfrica hace cuatro años de la victoria del sábado por 19-12 sobre Irlanda.

“Las dos son victorias fantásticas. En el 2015 entramos sin presión, nadie creía que podíamos ganar teniendo en cuenta el historial de Japón en el torneo, y vencer a Sudáfrica tuvo un gran impacto en el rugby japonés", dijo Leitch, quien ante Irlanda ingresó como suplente en reemplazo de Amanaki Mafi.

“Esta vez fue contra Irlanda, el segundo mejor en el ranking mundial y con la presión de ser el anfitriones, eso debe haber tenido un gran impacto. Entonces si me preguntan cuál fue mejor, diría que no hay mucha diferencia”.

El control sobre los forwards irlandeses tuvo una gran influencia en el resultado, y así otro seleccionado del Tier 1 fue víctima de una implacable exhibición de los Brave Blossoms, como sucedió en "el Milagro de Brighton" hace cuatro años.

“La voluntad de ganar y tener la confianza de que podíamos hacerlo, fue el factor más importante. El scrum nos salió especialmente bien y aplicamos presión sobre la pelota. Cada uno de nosotros cumplió con su rol", dijo el jugador de 30 años, miembro del equipo que ganó sus seis scrums. "Nos hemos preparado para este partido de la misma manera que contra Sudáfrica (un amistoso previo al torneo), con ocho jugadores empujando contra 10, algo que no hicimos antes del partido contra Rusia. Creo que los jugadores tuvieron mejores prácticas del scrum y eso se notó”.

El capitán del equipo de Japón asegura que este gran presente se debe a los frutos que rindieron los desafíos que enfrentaron los jugadores desde la RWC 2015, desde jugar contra selecciones del Tier 1, incluyendo dos derrotas contra Irlanda en junio del 2017, y la franquicia japonesa en el Super Rugby.

La atmósfera festiva que hubo en el Shizuoka Stadium Ecopa también jugó un papel muy importante y es algo que el capitán de Japón atesorará toda su vida: “He jugado en grandes estadios, estuve en Brighton frente a Sudáfrica y también jugué en Twickenham, pero este fue el mejor estadio que he jugado en mi vida ", dijo Leitch. “La cancha estaba llena de camisetas rojas y blancas; también había muchos fanáticos irlandeses. Cuando los escuché sentí lo maravillosa que es esta Copa Mundial de Rugby”.

“Los fans de Japón nos ovacionaban cada vez que aplicamos presión o cuando la estábamos recibiendo, y eso lo deben haber sentido los jugadores irlandeses. Espero que sigamos recibiendo este apoyo".

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