El seleccionado irlandés derrotó en la final del Qualifier llevado adelante en el So Kon Po Stadium de Hong Kong al local, por un categórico 28-7 y se llevó de Asia lo que fue a buscar.

De la mano de Jordan Conroy como figura en un equipo equilibrado y eficaz en todos sus aspectos, Irlanda festejó de manera merecida. Cabe destacar que para llegar al encuentro decisivo, el conjunto europeo superó en semifinales este domingo a Alemania, por 19-10 y previamente, en cuartos de final, se impuso sobre Rusia, por un categórico 47-0.

En la fase de grupos, Irlanda había derrotado un día antes al propio elenco ruso (33-7), a Jamairca (26-0) y había igualado con Uruguay (26-26).