Cinco años atrás, en el estadio Luzhniki de Moscú, Nueva Zelanda celebró doble tras quedarse con los títulos masculino y femenino de Rugby World Cup Sevens.

Fue el segundo título para los varones de Nueva Zelanda bajo la conducción de Gordon Tietjens – el primero fue en 2001 en Argentina – y el primero para las mujeres que cuatro años antes habían perdido en una final en muerte súbita en Dubai.

Tim Mikkelson y Sarah Goss participaron de la celebración en una inundada capital rusa en junio de 2013, además de celebrar en la Gold Coast australiana al ganar ambos medalla dorada en los Commonwealth Games derrotando a los campeones olímpicos Fiji y Australia.

“Fue un momento muy especial el de 2013 porque teníamos un equipo inexperto," recuerda Goss que se unió a un selecto grupo que ganó tanto el mundial de seven como el de quince, al ganar el año pasado con las Black Ferns la Women's Rugby World Cup glory en Irlanda.“

The Black Ferns first Rugby World Cup Sevens win
Portia Woodman talks about the Black Ferns first ever Rugby World Cup Sevens win in Moscow 2013

“Fue un torneo difícil, con sol hasta la final y luego una tormenta que cambió la dinámica de como jugamos. Fue increíble poder volver a casa con la Rugby World Cup y un torneo que no habíamos ganado antes."

Finales distintas

“La motivación en San Francisco es volver a lograr lo mismo."

“Entrenamos a la par con los varones a diario y es fantástico; los dos queremos lo mismo así que ojalá podamos celebrar nosotras el sábado y ellos el domingo."

Mikkelson y Goss han desde entonces asumido la capitanía, aunque en los varones es en tandem con Scott Curry.

Las mujeres le ganaron a Canadá en una trabajada final mientras que los varones le ganaron a Inglaterra por un mas cómodo 33 a 0.

El éxito en Moscú le permitió a Nueva Zelanda por primera vez tener posesión al mismo tiempo de los cuatro títulos mundiales en quince y seven, un escenario que confían poder mantener este domingo en el AT&T Park.

Cuatro finales

Goss, Mikkelson and Curry saben que no será fácil conseguir el título en este novedoso formato de eliminación directa ya que se necesitan cuatro victorias en esta RWC Sevens 2018 para quedarse con el título.

“Hay que poder ejecutar bajo presión, para ganar la Copa del Mundo," admite Mikkelson, el World Rugby Men's Sevens Player of the Year tras la final de Moscú. Entre las mujeres, la ganadora fue Kayla McAlister.

Tim Mikkelson reflects on Rugby World Cup Sevens 2013 glory
We took New Zealand's Tim Mikkelson to the Roxie Theatre in San Francisco - the oldest continuously operated cinema in the US to reflect on his side's 2013 World Cup Sevens win.

“Son muchos los equipos que podrían ganar aquí. Son solo cuatro partidos y la presión está, ya que si pierdes estás afuera; son todas finales, algo en lo que Nueva Zelanda es bueno así que espero nos vaya bien."

“Ganador de nuevo el título es algo que hemos hablado; supongo tiene que ver con hacer historia y dejar un legado, algo que ningún equipo hizo antes por lo que queremos logarlo," sentenció Mikkelson.

Desafío extremo

Sarah Goss comparte, como capitana de las Black Ferns, con Mikkelson el parecer. Su equipo llega tras ganar los Commonwealth Games, Kitakyushu, Langford y Paris y 23 partidos invictas. “Será un desafío extremo, muy difícil."

"El formato de eliminación directa y la calidad de los equipos son un enorme desafío pero tengo confianza en el equipo y como venimos jugando en estos últimos meses."

“Tenemos el hambre de defender el título y llevar nuevamente la Rugby World Cup a casa."

Las mujeres debutarán ante las novatas de México mientras que los varones deberán esperar al resultado entre Rusia y Hong Kong para conocer su primer rival.