Nueva Zelanda fue el equipo más regular del fin de semana y se coronó como el mejor en el Westhills Stadium de Langford, tras la disputa de la quinta etapa del HSBC World Rugby Women’s Seven Series.

En un duelo de oceánicas, las de Negro mantuvieron un equilibrio clave, que las favoreció a lo largo del cotejo y del certamen. Al cabo del primer tiempo, las Black Ferns se impusieron 22-0, con 10 puntos de su estrella, Portia Woodman. En el complemento, el equipo no bajó su nivel y con la misma tónica prácticamente doblegó el marcador, para coronarse en un cónclave espectacular.

“Mis compañeras hicieron un trabajo excepcional y me abrieron mucho espacio para marcar. Si agarrás la pelota, entonces es más fácil llegar a concretar, así que eso fue desde lo personal, lo más importante en esta final", indicó Woodman.

“Estoy realmente orgullosa de las chicas, ya que hicimos un gran esfuerzo. No le quito crédito a Australia, que son un equipo increíble. Nos encanta enfrentarnos y demostrar el increíble momento que está pasando el rugby femenino", sostuvo la capitana, Sarah Goss.

Las Aussies y Nueva Zelanda, arribaron al encuentro decisivo tras vencer en semifinales a Francia y a Estados Unidos, por 17-12 y 33-10, respectivamente.

Por otra parte, USA obtuvo la Copa de Bronce; Canadá se quedó con el quinto puesto; Inglaterra se ubicó en el séptimo lugar y, Japón logró el Challenge Trophy.

Cabe destacar que en los cuartos de final disputados a en la apertura de la jornada, Francia le había ganado 27-0 a Irlanda; Australia a Fiji, 21-5; Estados Unidos había doblegado a Canadá, 28-24 y Nueva Zelanda a Inglaterra, 17-12.

Mientras que, por las semifinales del Challenge Trophy, Japón derrotó Brasil por 31-21 y España le ganó a Rusia, 14-7.

En tanto que en el marco de las semifinales por el quinto lugar, Irlanda concluyó 19-7 sobre Fiji y Canadá 35-12 ante Inglaterra.