La final entre Fiji y Gran Bretaña fue el mejor cierre para un torneo que cambiará la historia del deporte ovalado. El equipo del pacífico tenía una cita con el destino en el estadio Deodoro que no desaprovechó y jugó a un nivel superlativo para revalidar sus pergaminos de campeón de la Serie Mundial de Seven con la medalla de Oro en los Juegos.

El podio lo completó Sudáfrica que superó a Japón la gran sorpresa del torneo. Entre los representantes de habla hispana, Argentina finalizó sexto y España fue décimo.

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La gran final

Con paciencia y sumando fases de juego, Fiji atacó a GB hasta que una doble marca abrió un hueco en la punta y Osea Kolinisau aprovechó el hueco para sumar los primeros puntos. Esta fue la primera gota de una lluvia de tries que los paraguas defensivos británicos no pudieron contener.

Los espacios fueron apareciendo y uno a uno Tuwai Vunisa, Veremalua, Nakarawa y Ravouvou fueron sumando sus nombres al tanteador.Cabe destacar que Fiji dio una exhibición de Seven ante un gran rival que sólo pudo defenderse e intentar atacar cuando un error de manejo le dio la posesión.

Dan Norton macó el try del consuelo, premio a su lucha ante un rival que jugó a un nivel superlativo. Campeones de la Serie Mundial redondearon la goleada con dos tries más (Tuisova y Mata) para cerrar el tanteador 43-7.

Sudáfrica se quedó con el bronce

Los sudafricanos lograron subirse al último peldaño del podio tras superar a Japón por 54-14. Sin duda alguna los nipones fueron el equipo revelación por su organización defensiva y jugar de igual a igual ante rivales de mayor envergadura fisca o renombre.

Los tries de Specman (en dos ocasiones) y de Jongh castigaron los errores japoneses con puntos pero a pesar del descuento de Kuwazuru, tras una jugada conbinada de pases corto, el partido estaba definido antes del descanso.

En el complemento los tries de Cecil Africa (2), Geduld, Specman y Kolbe redondeó el marcador y el merecido tercer puesto para los africanos.

Premio consuelo para los neozelandeses

Lejos de conseguir lo que fue a buscar a Río, Nueva Zelanda se quedó con el quinto lugar tras superar a Argentina por 17-14.

El equipo de negro intentó imponer el ritmo de juego como es su costumbre, pero la defensa y a la agresividad en los puntos de contacto de los argentinos redujeron los espacios al mínimo.

Akira Ioane tuvo su chance en la primera parte por la punta marcando un try pegado a la bandera que no fue convertido. En el complemento, los neozelandeses se soltaron y comenzaron a encontrar espacios. Un try Mikkelson y otro Rieko Ioane pusieron una ventaja determinante en el marcador. Con el reloj en contra Argentina fue a la carga y consiguió descontar pero los tries de Imhoff y Moroni no fueron suficiente.

Finalmente, Francia cerró su participación en Río de la misma manera en la que empezó: con un triunfo ante Australia (esta vez por 12-10) y se adjudicó la séptima posición.

Aquí todos los resultados de la última fecha

Pensando en el futuro, es innegable la importancia que este torneo tendrá para la difusión del rugby alrededor del mundo y sobre todo Brasil que ha sido un excelente anfitrión.

Sólo queda decirle gracias Ned Haig un carnicero escocés que en 1883 creo el seven como alternativa veraniega para recaudar fondos en su club. Quién iba a pensar que su adaptación del rugby llegaría a los Juegos Olímpicos para quedarse.